jueves, 8 de diciembre de 2016

El Viaje III




Ya empecé a hacer la maleta ggggg, para que no se me queden cosas importantes como los regalitos que llevo. Tengo complejo de santa y me gusta llevarles alguna cosilla a cada uno ya que voy pocas veces. Caracolo me dice que no lleve mucha ropa, pero una nunca sabe cuál le pueda hacer falta. 
La primera vez que fui llevé demasiado equipaje. Y las demás veces también para qué mentir. A Caracolo le empaco dos o 3 camisetas y pongo parte de mis cosas en su maleta también, es que hay que aprovechar bien el espacio.

Soy una Caracoa de tradiciones, y este viaje pienso mantener la tradición del permiso. No no es la tradición de la educación formal, yo soy educada en todas partes, menos cuando me provocan.
 Es otra historia. Se las cuento ahora...

La primera vez que Caracolo me llevó a su pueblo, fue la primera vez también que iba a conocer a sus padres y hermana, en fin toda su familia. Llevábamos unos 3 meses de novios y sólo conocía a su familia por teléfono. No tenía fotos de ellos en la Universidad, así que no los había visto tampoco, preguntándole más o menos e había hecho una imagen de su hermana rubia con rizos. Caracolo en su cartera llevaba una foto de carnet diminuta y vieja de su papá y más o menos me hice la idea.

El viaje duró entre 4 y 5 horas no recuerdo, es que varía en dependencia de cuántas veces pare el chofer a recoger recados o si se atraviesa una mula en el camino que puede pasar...
Ante la emoción de visitar un lugar nuevo y conocer a mis suegros iba despierta después que pasamos de la provincia antes de la de Caracolo.

Caracola: ya llegamos?
Caracolo: no.
Caracola: ya llegamos?
Caracolo: que no
Caracola: estás seguro?
Caracolo: yo soy de aquí recuerdas, yo te aviso, todavía faltan varios kilómetros.
Caracola: (3 min más tardes) y ahora cuánto falta?
Caracolo: lo mismo que hace 3 minutos...
Caracola: (unos kilómetros después, me comí una menta para el aliento, me cepillé el pelo y recogí en el bolso las cosas que llevaba afuera) Y ahora?.
Caracolo: falta un poco.
Caracola: oye estoy viendo naranjas dibujadas en varias casas, cafeterías y mercados, ese es el símbolo de tu campo, dime que ya llegamos.
Caracolo: jajaja, si ya un poco más a delante y ya. 
Caracola: ahora si eh, ehh, ehh? Oye que el chofer está parando. Dime! Creo que veo a tu hermana es esa muchacha rubia? eh? eh? y tu papá y tu mamá cuáles son?
Caracolo: si creo que sí deben estar por ahí.

Caracolo estaba de pie en el pasillo del autobús cogiendo el equipaje de mano y no estaba mirando. A veces me da por loca, es así. Cuando ya estoy en la puerta del autobús había un montón de gente abajo y había un señor justo delante de la puerta. Yo pensé, pero será posible que no me dejen bajar, mira que mi bolso pesa y tengo que mirar bien los escalones y el pelo metido en la cara.....argg Le digo con educación: "Permisoooo por favor, permisooo dejen bajar" (apártate y déjame bajar coño, en mi mente)

Cuando bajé y caminé un poco para esperar a Caracolo él se baja y me presenta a su familia, "ella es mi hermana" - ehh si la rubita que había visto por la ventanilla, "ella es mi mamá" -suegriii (unos besos, muas muas) y "este es mi papá"  -ostias el señor. 

Qué. Clase. De. Pena. #hijodetumama

Suegrito: Yo te quería ayudar a bajar y recogerte el bolso, pero...
Caracola: Lo siento mucho es que Caracolo no me hacía caso y no me quiso decir si estabas entre la multitud ni quién eras.

Hasta el día de hoy en la sobremesa en casa de mis suegros se hace esta broma del permiso-permiso, y mi cuñada dice: "con la ilusión que tenía tu suegro de que vinieras que hasta limpió los enchufes y tú lo primero que le dices es permiso dejen bajar" jajajajaja

Menos mal no dije lo que tenía en mente.

PD: Un besote a mis suegris y mi cuñi para cuando tengan Internet y lean esto. Soy vidente, algún día lo tendrán.




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