martes, 25 de diciembre de 2018

Vacaciones locas 3.



Anteriormente… 

No sé para qué pongo anteriormente si pienso publicar los post seguidos, pero bueno… 



Mi cuñada tiene un nuevo novio que vamos a llamar Pedrito. No me voy a ir por las ramas: SPOILER ALERT el día de la barbacoa fue el mismo que la sesión de fotos. 

Pedrito pinta, canta, baila, forma parte de una banda de rock (la única del pueblo), ha estudiado diseño gráfico y trabaja como editor de fotos en un estudio. También le ha dado por cocinar y un día nos invitó a comer, muy rico todo, pero a lo que voy es: que a mi cuñada se le ocurrió que podíamos hacernos unas fotos familiares en el estudio donde trabaja Pedrito. 

Por mí GUAY, 
por Caracolo mmmmm
pero… 

¿Qué me pongo!? 

Ven lo que les decía, no tenía nada presentable para la sesión si no fuese por el vestido que empaqué, que al final no me puse. Tuve la suerte de que tíaCaracolo me trajo unas ropitas porque además de programar la sesión de un día para otro, acordaron vestirse de blanco (no sé quién fue). Nosotros no somos de usar blanco, todo el mundo sabe que te hace más gordo, y se ven más las manchas de salsa de espaguetis. 

La sesión fue temprano en la mañana y eso + sacarse fotos en pose = pone a Caracolo de mal humor. 

Le prestaron una camisa blanca, debajo fue en short y sandalias como siempre lleva. Total, que el cuñado edite las fotos después y le ponga pantalón si quiere ¿Verdad? Yo me puse prácticamente todo lo que me trajo tíaCaracolo, camisa blanca y jean oscuro. 

Reunimos a todo el familión y nos fuimos al estudio en coche (el de caballos) que queda en la entrada casi del pueblo. La sesión no fue mala estaba climatizado el local, nos maquillaron de uno en uno, le mojé el pelo a Caracolo para que no pareciese Crusty el de Los Simpsons y bendita sea la Internet por datos móviles, estuvo entretenido todo el tiempo y no se puso de mal humor. 

Eso y que le prometí helado al salir. 

Luego del helado nos cambiamos, es que barbacoa y blanco no pega, así que tocaba negro y fuimos para el apartamento de Pedrito. 

La tarde transcurrió entre muchas costillitas al carbón que hizo Caracolo, yo de DJ y mi suegro de cuerpo de baile. Allí nos pasamos toda la tarde y la noche. Incluso después que se fueran todos: mis suegros, abuelas y padres de Pedrito. 

Una vez nosotros cuatro, solos, Pedrito cambia la música y pone Mojinos Ezcosíos… 

Si es que es de los míos!

lunes, 24 de diciembre de 2018

Vacaciones locas 2



Anteriormente… no participé en el concurso de belleza pero sí de una sesión de fotos.

Ahora les cuento.


Esperamos a mi suegra que venía detrás nuestro y nos fuimos para la casa. Más tarde llegó mi suegro que no nos pudo alcanzar, el pobre cada vez que sale lo detienen a conversar/saludar cada tres pasos, es lo que tiene ser muy popular y ser el médico del pueblo. 

Empecé a desempacar algunas cosas que les llevaba entre ellas un pomo de salsa barbacoa ya que nos habían anunciado con tiempo que compraron costillas de cerdo para hacer en una mini barbacoa. Estos 8 días pintan buenos. 

Los primeros tres días fueron muy tranquilos principalmente comía y dormía, ni siquiera leí, ni vi tv, nos la pasábamos conversando en familia y la agradable tarea de no hacer nada. Allá se come con manteca mayormente, para los arroces, carnes, viandas (mmmm yuca con mojo) y pan con mantequilla en los desayunos, la cual yo traté de evitar. Saben qué? No me salió ni un grano. He llegado a la conclusión de que salen por estos motivos: estrés, escuatro y escinco. A parte de los días antes de la regla. 

Sabíamos que no íbamos a estar ahí para navidad ni fin de año, por eso nos pusimos manos a la obra (Caracolo manos a la cerveza). Armamos el arbolito de la casa y el de abuela María que vive cerca en su nuevo apartamento y todos los días a menos que ella ya estuviese con nosotros, íbamos a verla a las 5:00 pm, cual ingleses pero en vez de té, a tomar café. 

Compramos chuches de chocolate, papitas con sabor a jamón, cervezas y maltas para celebrar. Comí de todo y siempre que quise pero con moderación para no ganar el peso perdido en los meses pasados.

También fuimos un par de veces al parque a conectarnos por la WIFI hasta que… chan chan chan

Anunciaron oficialmente el uso de datos móviles para conectarse a Internet. Si me estás leyendo y eres cuban@ pues ya debes saber de todo, los diferentes planes, cómo usarlo, ahorrarlo, aplicaciones recomendadas, etc. Si no eres cuban@ debes estar (o no) sorprendido de esta noticia. la verdad yo lo esperaba para el 2019 o 2020. 

Esto quiere decir, caracolas, que ya puedo (y estoy) dando la braza en Twitter y publicando desde mi camita. Yuju. 

Ya me había olvidado de la sesión de fotos… 

Resulta que mi cuñada tiene un nuevo novio, hace como 6 meses, pero no lo conocíamos. Y es taaaaann guay y parecido a nosotros, tan compatible con Caracolo y conmigo que el día de la barbacoa… 

Eso va en otro post y lo de la sesión de fotos también. 
Aguantad!!!

viernes, 21 de diciembre de 2018

Navidades locas (La serie)



Estas navidades las empezamos a celebrar desde el 2 de diciembre, día en que arribamos al pueblo de Caracolo. Fuimos a principios de mes para coincidir con tíaCaracolo que vino de los Estados Unidos y hacía años que no nos veía face-to-face. El viaje para qué contar… bueno sí… lo contaré sino para qué tengo blog.

El ómnibus sale a las 4:45 am eso ha sido siempre así. Nosotros salimos de casa a medianoche, por qué? Porque después no sabemos si llegaremos a tiempo debido al transporte que de madrugada es escaso/malo/una-caca-de-vaca-paca. Con tan buena suerte que cogimos un taxi enseguida llegando a las 12:30 a la terminal. Es lo que siempre hacemos, pasar la noche en la terminal, pero esta vez no nos dejaron pasar a la sala de espera. Mierda. Tuvimos que esperar en unos bancos sin espaldar hasta las 3 am, ya que según el guardia sólo se puede entrar una hora antes de la salida. Vaya mierda de regla, si la sala estaba vacía, qué más le da. 

Pero yo mente feliz de poder ir al pueblo de Caracolo y vacacionar. 

El ómnibus llegó y estábamos tan cansados que nos dormimos sentados en los asientos que nos correspondían, antes de que nos chequearan los tickets de los pasajes. (Que es lo primero que hacen antes de arrancar). Me abrigué superbién para no pasar frío y no despertarme en todo el viaje. Llegué entumecida porque no me moví del asiento ni me bajé en las paradas que hace por el camino en otras provincias para que los pasajeros hagan lo normal (comer, ir al baño, estirar las patas, fumar, etc...) A mí no me gusta lo normal. Yo no quiero comer nada por ahí, ni ir a baños públicos, eww. Yo hiberno esas 4 horas y pico. Muy a gustito no estaba porque íbamos como sardinas en lata, los asientos muy pegados y una mochila encima, pero tenía mucho sueño acumulado, que se yo, de tres meses durmiendo en hospitales. 

Al sentir la guagua temblequear y sacudirse entendí que estábamos llegando, es el aviso de que la carretera se pone mala de baches y piedras. Avisé a mi suegra que estábamos llegando y que le avisaba otra vez cuando viese la entrada del pueblo… 

…y me quedé dormida otra vez. No le pude avisar. 

Este viaje no llevamos maletines. 

Caracolo: Caracola vamos por 8 días, no empaques en maletines, nada de equipaje sólo una mochila para cada uno. 

Caracola: Y si hace frío? Y si hace calor? Y si vamos a la playa o salimos a comer. Y si me invitan al concurso de belleza del pueblo, y si gano? Qué me pongo? Eh eh eh??!! 

Caracolo: DOS MO-CHI-LAS… 

Es que es un insensible. Pero como tiene razón y al final era poco tiempo llevé ropa mayormente negra que pega con tó… y leggins, y un chándal, y mi abriguito, y 3 juegos de dormir, y un vestido, bufanda, medias, y 3 shorts, y dos bikinis. Y para qué dos bikinis? Pues porque sí, yo tengo mis cosas. Eso sí solo dos pares de sandalias más las que llevaba puestas. Esa es mi versión de empacar poco. Siempre se puede ir "algo" de polizón en la mochila de Caracolo. 

Pos eso… que llegamos a la terminal del pueblo de Caracolo y no había un alma esperándonos, humm esto está raro… no pude hacer el chiste tradición de permiso-permiso con mi suegro, ni decirle a mi suegra que está como una Barbie. Como no teníamos que esperar que descargaran los equipajes, Caracolo tomó mi mano me arrastró en dirección a su casa y yo no lo podía creer iba caminando mirando hacia atrás a ver si reconocía a alguien familiar y nada. Cuando estábamos doblando la esquina del edificio de Caracolo alguien en bici le dice: Caracolo, allá atrás viene corriendo tu mamá tratando de alcanzarlos. 

A ver, dos cosas, es que no es normal que la guagua llegue en tiempo, y que "alguien" se durmiera y no avisara que ya entraban al pueblo, bueno, eso si es normal. 


Continuará…

martes, 4 de diciembre de 2018

Rehab



Hola Caracolas continúo las transmisiones, más para mi propio bien que para el de ustedes ya que en este blog me he volcado y me ha servido para canalizar un montón de cosas que pasan por la mente de esta caracolita. Se habrán dado cuenta que estuve unos meses sin escribir y lo último que puse fue que era relativo a la salud de papáCaracolo.

Ahora ya puedo hablar de ello, quiero creer que lo peor ya ha pasado y lo mejor está a la vuelta de la esquina. Si algo reconozco de mí, es mi positividad y aunque el almanaque diga que falta poco de 2018 yo creo que aún queda tiempo para algunas cosas. Como por ejemplo actualizar el blog.

No sé si este resumen me quede corto o largo, ahí va.

Me gusta describir el momento exacto en el que escribo estas líneas para que se lleven una idea: estoy sentada en el sofá de mi casa, sola, con las piernas estiradas, offline como siempre y con una musiquita instrumental de fondo que es una mezcla de piano con oleaje. Bello.

Bueno a lo que importa. El pollo del arroz con pollo, como decimos en Cuba. Lo último que supieron fue que Caracolo estaba para Alemania y yo había dejado mi trabajo, me estaba tomando un mes de vacaciones hasta que Caracolo llegó. Al día siguiente a papaCaracolo le da un infarto-cerebro-vascular. Ahorrando detalles tristes corrimos con él de consultas para hospitales y luego de tres meses se ha rehabilitado como un campeón y bastante rápido. Teniendo en cuenta que tiene hemiparesia del lado izquierdo, la edad, que al principio no podía ni sentarse solo en la cama y que es un proceso bien largo…

Pues aquí van palabras de aliento para los que estén pasando por algo similar: atiéndase a tiempo, persevere y luche que muchos lo logran con tres factores muy importantes: el tiempo, la familia y la actitud del paciente. Mi papá al día de hoy se vale solo para muchas cosas, recuperó la movilidad de la mano casi completa y está caminando con bastón de cuatro puntos. Nada mal, verdad?

Nos dieron de alta el día 9 de noviembre y ahora es que me encuentro en condiciones (creo) de regresar y refugiarme en estas páginas. Pues en ese tiempo mi vida puso stop y me dediqué por entero a su recuperación. Dejé a un lado todos mis planes y proyectos, estaba desempleada, e ingresada como acompañante en una sala de hospital junto a otros 17 pacientes y acompañantes. He visto mucha gente sola y con diferentes problemas y mucha gente buena que nos ayudamos a convivir esas semanas. He visto de todo, cosas que parten el corazón.

Lo bueno de lo malo es que esta experiencia me da como para escribir un libro.

Próximamente en la Feria del Libro de La Habana el libro REHAB de Caracola.

#Yo-me-mi-conmigo



Este post originalmente era para publicarlo en agosto pero dadas las circunstancias (que contaré en el próximo post), lo publico ahora.
Uno de los significados de mi nombre, no de Caracola, sino ya saben, el del carnet, dice que soy una persona que ama la soledad. A ver, a mí no es que me guste estar sola, pero cuando lo estoy, disfruto de mi compañía. #Yo-me-mi-conmigo

Oigo música, leo, bailo, me hago un facial, pruebo alguna receta, reviso fotografías, juego, veo alguna serie, me siento en mi balcón a tomar un café y mirar las lagartijas, e incluso escribo, como hago ahora.

En estos 50 días sin Caracolo les voy a contar varias cosas que he disfrutado sola.

Del paquete semanal* he ido copiando y copiando cosas pa´ luego, pa´ cuando tenga tiempo y se me estaba llenando el disco de la PC como es lógico. En este tiempo me he dedicado a limpiarlo. Sin mentir tenía cientos de películas y ninguna serie, no hay nada por ahora que me atraiga o enganche desde que vi Casa de Papel. Eso sí, tenía unos cuantos capítulos de Los Simpsons atrasados que ya me los terminé.

De las películas les voy a mencionar las que han valido la pena incluso una me hizo llorar. Algunas las borraba porque estaban en mala calidad, o la había copiado sin saber que ya la había visto, o no eran interesantes y las veía corriéndolas. Sabes si una peli te gusta cuando no la interrumpes mucho y no le corres el tiempo, una de esas que te mantienen en atención.

Aquí tienen la lista de las que me han gustado.

1 Baby Driver: Con el hermoso Ansel Elgort de prota que hace de un chofer excepcional (vas a ver mucha acción sobre ruedas) y no más spoilers.

2 La forma del Agua: Si, ya sé que se estrenó hace rato y que ganó un Oscar pero no me había puesto a verla, jolines, las cosas tienen su tiempo.

3 Gifted: Hermosa, y preciosa película con una niña como lo dice su título: Dotada. Esta fue la que me hizo llorar. Plus: tiene un lindo gato y un buenorro lindo tío.

4 Hidden Figures: Una película histórica basada en tres mujeres increíbles en su trabajo en la Nasa que no era para nada (re) conocido. También fue un paseo a los inicios de las computadoras con tarjetas perforadas.

La 2, 3 y 4 tienen en común a la actriz Octavia Spencer, ya la encuentro entrañable y por lo que se ve muy talentosa.

5- The Limehouse Golem: Esta película la vi incluso estando doblada al español (cosa que detesto, pero hago excepciones) es de género policial y suspenso situada en Inglaterra, va sobre el mítico Golem que comete crímenes sangrientos.

Así queda mi top 5 de pelis este verano, a ver si me animo a hacer otro top para el próximo o para fin de año.

También vi algunas comedias mientras cosía, nada importante que me perdiera por apartar la vista de vez en cuando. Recuerdo que me reí mucho con una de Adam Sandler: The Week Of. El encargado del hotel siempre se estaba riendo aunque estuviesen sucediendo calamidades. Ese hombre me hacía llorar de risa.

Que se te cae el techo pues jajaja, que se te inunda el salón: más jajajás. Era todo un loquillo.